Objetivo: ganar tiempo, atender más personas con calidad consistente, crear sistemas y conocer tu capacidad real.
1) Define el resultado estándar
Antes de todo, aclara qué entregas siempre. Describe el “producto final” con ejemplos, formatos y criterios de calidad para que cualquiera sepa qué es “bien hecho” y qué queda fuera. Usa plantillas mínimas para el brief, la propuesta, la entrega y el feedback. Así reduces dudas y expectativas mal alineadas.
2) Empaqueta en 1–3 ofertas clarasv
Convierte tu trabajo en paquetes con nombre por resultado, no por horas. Define alcance, límites y tiempos de entrega estándar, y ponles precio fijo. Cotizar se vuelve cuestión de minutos y evitas negociar cada caso desde cero.
3) Crea un SOP de 1 página por paquete
Cada paquete merece un proceso simple y visible. En una sola página, lista pasos numerados (máximo 10), responsables y tiempos estimados. Cierra con una checklist de QA antes de entregar. Te dejo una estructura sugerida: propósito y alcance, herramientas y plantillas, pasos con tiempos (por ejemplo 20m, 45m, 15m) y checklist de QA.
4) Bloques de tiempo repetibles en tu calendario
Agrupa tareas similares en bloques fijos (por ejemplo Edición, Revisión, Ventas) y ponlos de forma recurrente con recordatorios. Evita la multitarea: un bloque, una energía. Ganarás velocidad sin quemarte.
5) Mide tu capacidad (fórmula simple)
Calcula tus horas reales de trabajo a la semana (T) y cuánto toma una entrega estándar según el SOP (E). Tu capacidad semanal aproximada es T / E. Si, por ejemplo, T = 20h y E = 2h, puedes hacer 10 entregas por semana. Deja un 20% de buffer para imprevistos.
6) Sistema de intake y priorización
Usa un formulario de ingreso para pedir solo lo clave y los archivos necesarios. Prioriza por pago confirmado, urgencia real y valor del cliente. Mantén un único flujo de estados: Por hacer → En proceso → QA → Entregado. Menos persecución de info, menos retrabajo.
7) Automatiza lo obvio
Empieza manual, documenta, y automatiza lo repetido. Activa correos de confirmación y recordatorios, plantillas de propuesta y factura, y una carpeta o espacio por cliente con estructura clonable. La idea es quitar fricción sin complicar.
8) Revisión semanal de capacidad y cuellos de botella
Cada semana, ajusta los tiempos reales por paso. Identifica el paso más lento y mejóralo primero. Si cambió el tiempo estándar, actualiza precios. Así mantienes márgenes y entregas consistentes.
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